
Pep Guardiola dispuso al equipo en 4-3-3. En el eje de la zaga entró Kolarov como central zurdo por un Stones que en los últimos partidos estaba mostrando un nivel bastante bajo. El centro del campo muy ofensivo lo formaron Yaya Touré como pivote y De Bruyne - Silva como interiores por la derecha y por la izquierda respectivamente. Las alas las ocuparon Sterling y Sané, jugando el inglés por la derecha.
Por su parte Mauricio Pochettino fue fiel a su 3-4-2-1 que tan bien le estaba funcionando con la novedad de Wimmer como central diestro. Wanyama ejercía como pivote diestro y Dembélé como el zurdo. Por delante Dele Alli y Eriksen se repartían la zona de tres cuartos encargándose el danés más de la construcción y el inglés de correr al espacio para aprovechar los huecos que creaba Harry Kane.
El conjunto citizen protagonizó un buen comienzo asentándose con la posesión en campo rival y acelerando el ritmo cuando merodeaban el área pero el buen trabajo defensivo del doble pivote de los Spurs dificultaba que Silva y De Bruyne pudieran mover a los locales derivando en un City que solo cercaba portería cuando el juego transcurría por las bandas.
El Man City hizo una buena primera parte pero no consiguió alterar el luminoso.
Los londinenses se mostraban muy sólidos en defensa pero bastante blandos en ataque. Les costaba bastante superar la buena presión del Man City en todo campo y acababan recurriendo a envíos directos que originaban peligro a las espaldas de los laterales donde caían Harry Kane y Dele Alli principalmente.
La dinámica del encuentro favorecía al conjunto skyblue que dominaba el centro del campo y por consiguiente el partido. Pochettino optó por modificar el esquema al 4-2-3-1 con Wanyama y Dembele en doble pivote, Heung-Min Son (entró por Wimmer) en izquierda y Dele Alli y Eriksen intercambiando posiciones.
El Man City merecía ir ganando pero Lloris y Alderweireld lo impedían hasta que Kevin de Bruyne apareció y se sacó de la chistera un pase medido para que Leroy Sané desequilibrara el marcador y un gol empujando el balón en área pequeña. Ambos goles estuvieron precedidos de dos pifias monumentales de Hugo Lloris.
Claudio Bravo volvió a encajar gol en el primer disparo a puerta del equipo rival.
Pero como este Tottenham tiene la garra de su entrenador y rara vez entrega la cuchara, en 4 minutos recortó distancias con un cabezazo de Dele Alli libre de marca en el área. El centro de Kyle Walker, una delicia.
Y rondando el minuto 80 empató el encuentro en una bonita jugada en la que se asociaron dentro del área Eriksen y Kane. El inglés con un toque precioso (y preciso) habilitó en el punto de penalti a Son que puso el 2-2.
Desde el prisma citizen hay que volver a destacar lo incapaces que son de ser decisivos en ambas áreas. Hoy de nuevo se mostraron bastante erráticos en el área rival teniendo ocasiones de sobra (17 tiros y 7 a puerta) para adelantarse en el primer tiempo. Pero peor aún están en área propia, en el primer gol se cuela Dele Alli a la espalda de Zabaleta y Otamendi y remata solo en área pequeña y en el segundo, pisa área Heung-Min Son llegando desde segunda línea sin que ningún centrocampista le siga el desmarque.
La posesión fue para el conjunto de Pep Guardiola.
El dominio alternó entre ambos equipos pero quizás la buena primera mitad de los locales pesó más que la buena segunda mitad de los visitantes, no obstante los 4 goles llegaron en la segunda.
Los mejores del encuentro:
PAUL ELLIS / Fotógrafo de plantilla